Entre
18 e 22 de outubro chega a Brasília a “Patagônia Fantástica”; um produto
turístico reconhecido internacionalmente que reúne, para o público mais
exigente, serviços de alto padrão em três incomparáveis destinos da Argentina.
Península Valdés:
santuário da fauna e da natureza. Em nenhum outro lugar do litoral patagônico
reúne-se semelhante concentração de animais: orcas, golfinhos, lobos e
elefantes marinhos e a rainha indiscutível, a baleia franca austral. Declarada
Património da Humanidade, esta península invade o mar formando dois golfos de
águas temperadas, local de encontro das baleias francas austrais, aonde acodem
a cada ano para cumprirem seu ciclo reprodutivo, deixando-se observar a poucos
metros de distância.
El Calafate: capital mundial das
geleiras, um espetáculo único que nos faz estremecer. O glaciar Perito Moreno,
junto com mais doze geleiras, constituem as grandes massas deslizantes de gelo
e neve do Parque Nacional Los Glaciares. Esta geleira de 5 km de largura e 60 m
de altitude sobre o nível do Lago Argentino está em pleno avanço. Durante o ano
todo surpreende com suas constantes quedas de torres de gelo que se fragmentam
em múltiplas montanhas.
Ushuaia: um paraíso no sul,
onde o único extremo é a beleza. A cidade mais austral do mundo, uma porta
aberta para a imensa solidão da misteriosa Antártida. O monte Castor, com seus
400 hectares de neve em pó e seus bosques de lengas (Nothofagus pumilio)
permite em suas 15 pistas a prática de esqui
até o mês de outubro.
Estes
destinos estão hoje mais acessíveis do que nunca com o novo voo diário da
Aerolíneas Argentinas para Buenos Aires e conexão direta no mesmo aeroporto
para a Patagônia.
Este
produto será apresentado aos diferentes públicos da capital brasiliense em
variadas atividades:
- Estande no Hall Central do Shopping
Iguatemi – 18, 19 e 20 de outubro. Uma mostra interativa impactante que
permitirá ao público conhecer paisagens inimagináveis e ambientes naturais
únicos. Na ocasião se poderá assistir a documentários e a palestras audiovisuais
sobre as proezas dos pioneiros da aviação na Patagônia como Antoine de Saint-Exupèry
-o célebre autor do Pequeno Príncipe-, Jean Mermoz e Gunther Pluschow, bem como
a experiências de longos voos em helicópteros e aviões por lugares de beleza
indescritível.
- Workshop na Embaixada da Argentina – 22 de
outubro, 15h00 – onde os operadores e as agências de turismo local serão
capacitados nestes destinos e mais especificamente nos seus serviços de alto
padrão tendo a oportunidade de se encontrar diretamente com os melhores hotéis
e serviços turísticos da região patagônica.
- Coquetel na Embaixada da Argentina – 22 de
outubro, 22h00 – o melhor da Patagônia, seu cordeiro, caranguejos, ostras,
merluza preta e camarões serão oferecidos pelo reconhecido chef argentino Lino
Adillón, e degustado junto com os vinhos da “Bodega del Fin del Mundo” e os
chocolates e tortas da “Abuela Goye”. Nesta ocasião, serão sorteadas passagens
e estadas para Ushuaia e el Calafate.
La Conferencia Internacional de Software Libre vuelve a Chubut
El próximo martes 22, el Aula Magna de la sede Puerto Madryn de la Universidad Nacional de la Patagonia volverá a convertirse en subsede de la CISL 2013, el tradicional encuentro de Software Libre que cada año reúne a los principales referentes nacionales e internacionales del movimiento. El principal orador será Bruce Perens, co-fundador de la Open Source Initiative, y Canal 7 Chubut presentará su proyecto del nuevo sitio institucional de la emisora, desarrollado íntegramente sobre código abierto.
Con la organización de Patagonia Digital Asociación Civil, la comunidad del software libre del Chubut y la región vuelven a tener un mano a mano con importantes voces internacionales. Así como ocurriera en 2012 con Jon “Maddog” Hall, presidente y director ejecutivo de Linux International, en esta ocasión será el turno de Bruce Perens, el autor de la definición del concepto “código abierto”.
El co-fundador de la Open Source Initiative, entidad dedicada a difundir las ventajas del software de código abierto, ofrecerá la conferencia “Open Source Experience, Court and Corporate - La Experiencia del Código Abierto, en el mundo jurídico y empresarial”.
Junto a él, participará del encuentro el subsecretario de Articulación Científica y Tecnológica de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva del Chubut, Santiago Miguelez, quien será el responsable de presentar el trabajo en la Unidad de Software Público provincial, como así también las acciones de fortalecimiento del sector TIC y la implementación del programa Argentina Conectada en Chubut.
Jorge Cabezas, director general de la CISL en Argentina, y Roberto Sahakian, director ejecutivo del evento, serán también oradores del encuentro de Puerto Madryn. Ambos poseen una vasta trayectoria a nivel nacional, desarrollada tanto en territorio del software libre como en la promoción de la soberanía tecnológica en Argentina.
Canal 7 Chubut avanza hacia el software libre
En el marco del encuentro, se presentará el desarrollo que se ha realizado en base a código abierto para el nuevo sitio web institucional del canal público.
La presentación estará a cargo del subsecretario de Medios y Comunicación Pública de la provincia, Sergio Fernández Novoa, junto a integrantes de Patagonia Digital que han participado del proyecto.
De esta forma, la gestión del gobernador Martín Buzzi da un nuevo paso hacia la consolidación de la soberanía tecnológica en el territorio provincial, un camino que este año presenta como antecedente reciente la creación del Programa Software Público y Telecomunicaciones “Chubut Libre” (Decreto 937/13). Entre los objetivos del mismo se encuentran el desarrollo del software disponible en organismos de la Administración Pública provincial y municipal, como así también “promover el desarrollo de las tecnologías de la información y comunicación, estimulando el uso de nuevas tecnologías para el desarrollo cultural, social, económico y productivo en la Provincia del Chubut”.
Conmemoración del 203° aniversario de la Revolución de Mayo: Palabras de la Presidenta de la Nación
Muchas gracias, muchas gracias a todos y a todas por esta plaza de la alegría, del amor, del amor por la patria, del amor por el otro, donde no venimos a insultar ni a agraviar, sino a festejar el Día de la Patria.
En este nuevo aniversario de nuestra querida patria, en este 203 aniversario, quiero confesarles a todos ustedes que ni ayer ni hoy ha sido un día fácil para quien les habla.
Junto a mi condición de argentina, como el resto de los 40 millones que recuerdan y festejan a su patria, surgen en mí también otras imágenes, otros recuerdos, porque hace exactamente 10 años, mi compañero de vida y de militancia, el presidente -qué paradoja- menos votado de todos los procesos democráticos y sin proscripciones de elecciones, era el que menos votos había obtenido y, sin embargo, vino a encabezar el proceso de transformación y cambio más importante de las últimas décadas.
Yo la verdad que quiero recordar la historia, quiero recordar estos 203 años de nuestra Revolución de Mayo, pero no hacerlo desde la versión anodina y aséptica que muchas veces nos explicaron.
Yo quiero recordar y veo en todos ustedes, en esas caras jóvenes, las caras de otros jóvenes, de French, de Beruti, de Moreno, de Monteagudo los verdaderos cerebros de esa revolución, French y Beruti que no repartían como nos enseñaron en el Billiken, escarapelas festejando la caída del virrey. Repartían escarapelas que en realidad eran cintas amarillas españolas marcando los que únicamente podían ingresar al Cabildo. Así se hizo la Revolución de Mayo y así se hicieron también los grandes procesos de transformación aquí en Latinoamérica y en el mundo.
Jóvenes con ideales también junto a nuestros hombres de armas, encabezados por Cornelio Saavedra, el Regimiento de Patricios, que eran las épocas fundacionales del país donde pueblo y fuerzas armadas, las ideas junto a los que empuñaban también las armas para defender esa gran patria que nacía, construían la historia.
Luego vinieron siglos de desencuentros, avances y retrocesos y también casi una década que cambió la historia en el siglo XX, y no quiero con esto, por favor, que lo vean como un sesgo partidario, es simplemente una carga histórica innegable, un movimiento político, el peronismo que vino a cambiar definitivamente la historia del país. Un hombre y una mujer que les enseñaron a los argentinos que al lado de cada necesidad había un derecho, que les dieron educación, vivienda, vacaciones, aguinaldos, a partir del año 53 convenios colectivos de trabajo que le dieron al trabajador, que incorporaron al trabajador y a la mujer a la vida política de los argentinos, que también, porque es innegable, afectaron intereses, porque antes de que llegara el peronismo, había explotación en el país; porque antes de que llegara Juan Domingo Perón y Eva Perón, a la gente se le pagaban dos monedas, no había vacaciones, no había aguinaldos, solamente había explotación. Cómo entonces no iban a ser combatidos y denostados.
Creo que es fácil entender también los ataques permanentes que sufrieran primero Néstor como presidente y después esta Presidenta; tal vez después de Perón y de Evita, las dos personas más difamadas, atacadas, ultrajadas y descalificadas de toda nuestra historia.
Pero no me quejo, sabemos que cuando afectamos intereses, sabemos que cuando defendemos a los sectores más vulnerables, sabemos que cuando incorporamos a millones de argentinos al trabajo, cuando creamos la Asignación Universal por Hijo que ya no permite que cualquiera contrate a un hombre o a una mujer por dos pesos, cuando consagramos nuevamente desde hace 10 años las convenciones colectivas de trabajo, en esta "década ganada" -mal que les pese es una década ganada- pero no por un gobierno, ganada por el pueblo. Cada conquista, cada hombre y mujer que pudo jubilarse y que hoy cobra su jubilación que se ajusta dos veces al año, cada pibe que recibe una netbook, no para escuchar cumbias por favor, como alguien decía el otro día, sino para aprender en el proceso de inclusión educativa más importante que se recuerde en toda la historia, con 9 nuevas universidades, con más de 1.400 colegios nuevos, en cada joven que hoy puede estudiar y trabajar, en cada mujer que luego del reconocimiento del trabajo de los empleados y empleadas en servicios domiciliarios, algo que ni siquiera Evita podía lograr también, tienen instrumentos y herramientas para pelear sus derechos en cada región del país. Porque me atrevo a decir también que es una década ganada en federalismo, en donde todas las regiones han sido incorporadas en un plan de obra pública sin precedentes, con infraestructura social y económica. Y también, porque no, en los miles y miles de pequeños y medianos productores, empresarios, comerciantes y también de los grandes que han obtenido en esta década ganancias, rentabilidad y crecimiento a sus empresas, que ha generado también los millones de puestos de trabajo.
Hemos logrado articular esto, y este es el mejor homenaje que podemos hacer a esos hombres y a esas mujeres que liberaron un pueblo hace 203 años, pero que la tarea había quedado inconclusa, porque todavía estamos peleando también ya no por la libertad, sino por la igualdad que es el gran signo de esta década y de las que vendrán.
Quiero también convocar a todos los argentinos a esta gesta, a que esta década ganada, le siga otra década más en que los argentinos sigan ganando también. Porque yo me pregunto, yo no soy eterna, lo he dicho muchas veces, y lo que es más importante, tampoco lo quiero ser. Es necesario empoderar al pueblo, a la sociedad de estas reformas y de estas conquistas para que ya nunca nadie más pueda arrebatárselas, y sé de qué estoy hablando.
Muchas veces leo en letra de molde que hablan del kirchnerismo y del fin del ciclo y yo me pregunto y le pregunto a todos los argentinos: el cambio de un gobierno por otro, ¿es fin de ciclo o en realidad a lo que se están refiriendo es a que cuando yo me vaya se va a acabar todo lo que hemos conquistado en esta década ganada? Me parece que se refieren a eso.
Me parece que cuando hablan de la Asignación Universal por Hijo con desprecio, me parece que cuando hablan en contra del desendeudamiento que comenzamos y que permitió generar un ciclo virtuoso en la economía, donde el Fondo Monetario Internacional no viniera a imponernos condiciones, tal vez se refieran a eso, a que también quieren que vuelva esa etapa.
O tal vez se refieren a que ya no va a haber más todos los años la fijación del salario mínimo vital y móvil, todos los años convenciones colectivas de trabajo donde incorporamos mayor poder adquisitivo porque a lo mejor ellos piensan que los salarios son los que provocan la inflación.
Yo digo que los precios no los ponen los trabajadores ni el gobierno. Yo digo que los precios los fijan los empresarios y los grandes monopolios.
¿A qué se refieren entonces, a qué se refieren?
Ustedes lo saben muy bien y hagamos memoria de estos 200 años; hagamos memoria cómo fueron atacados esos próceres, Moreno, Belgrano, a los que acosaban de ultras y jacobinos. Si Belgrano hubiera respetado las órdenes que emanaban de Buenos Aires, no hubiéramos tenido la Batalla de Salta y Tucumán. Por suerte, Belgrano era un joven desobediente porque era un patriota por sobre todas las cosas.
¿A qué se referían cuando también denostaban el gobierno del brigadier general Juan Manuel de Rosas que pudo resistir los embates del colonialismo francés e inglés? Luego vino lo que vino.
Cada ciclo de gobiernos populares ha tenido ataques feroces porque en realidad, cada una de esas dirigencias no era de ellas el problema, era el obstáculo, eran las herramientas que la historia del pueblo había tomado para transformar un destino de esclavitud, un destino de atraso y, entonces, había que destruir las herramientas.
Yo, nosotros, él, que no está más, no fuimos importantes ni seremos importantes por nosotros mismos. Somos apenas una herramienta de ustedes, del pueblo y me refiero, no solamente a los que están en esta plaza. Es más, me refiero también a aquellos que sin saberlo, muchas veces repiten lo que escuchan o lo que leen. No es la primera vez en la historia.
Hubo distintos instrumentos también para difamar, para distorsionar y sino, no quiero remontarme tal vez a una historia que muchos no recuerden, pero les recuerdo a todos algo que todavía está muy fresco en nuestra memoria: los invito a que cuando lleguen a sus casas, los que tengan una compu, los que puedan acceder a Internet, que son muchos hoy en la República Argentina, más del 50 por ciento de la población puede acceder a Internet, vayan y lean los diarios del año 2001, previos a diciembre, previos al corralito, vayan a ver, vayan a leer si algunos meses antes o apenas el mes anterior o apenas la semana anterior a que se confiscaran los ahorros, fundamentalmente de la clase media argentina, algún diario, alguna radio, algún medio televisivo, algún economista, de esos que hoy preanuncian catástrofes y apocalipsis todos los días, le habían anunciado a los argentinos que le iban a manotear la plata y no se la iban a devolver.
Nadie les avisó nada y no era porque no sabían, sino porque tenían complicidad. Ni qué hablar, ¡por Dios!, del período más trágico de nuestra historia, de ese que se inició el 24 de marzo de 1976. Lean lo que decían y lo que hacían, miren las fotografías, hasta alguien tituló "Tenemos nuevo gobierno". Recorran los documentos y archivos para ver con las cosas que se quedaron durante ese período en el que estas mujeres que están a mis espaldas de pañuelos blancos, todavía siguen buscando a sus hijos y a sus nietos.
Quiero confesarles algo: si bien nuestro Gobierno en materia de derechos humanos, en materia de castigo, castigo con la ley y la Constitución y los jueces de la Constitución, sobre los genocidas todavía y pese a eso, yo como argentina, siento con esas mujeres una inmensa deuda. Los argentinos todos, todavía tenemos una inmensa deuda.
Porque es cierto que están siendo juzgados, porque es cierto que están en prisión, porque es cierto que están purgando penas, porque es cierto que hay procesos judiciales que se abren todos los días, pero todavía no hemos podido encontrar a sus hijos ni a sus nietos y esa es una deuda que todavía no ha sido saldada por el conjunto de la sociedad ni de los gobiernos.
Yo quiero la unidad de todos los argentinos, pero quiero la unidad con memoria, con verdad y con justicia. Porque sin eso, no hay unidad posible y la necesitamos, la necesitamos en este proceso de transformación económica y de inclusión social y también, de grandes reformas políticas.
Reformas políticas que muchos no creían porque pensaban que eran enunciados cuando hablábamos de las internas abiertas, obligatorias, simultáneas y vinculantes para todos los partidos políticos iniciando el proceso de reforma política más importante.
Y también ahora, con la reforma que necesita la Justicia para democratizar también al tercer gran poder del Estado que necesita y que los argentinos necesitamos que sea democratizado.
Por eso la igualdad en el acceso, por eso también el voto popular en la representación de los organismos políticos en ese tercer poder el Estado.
¿A quién puede molestarle? ¿Cómo puede negarse el derecho a 40 millones de argentinos a elegir a quiénes son los que van a representarlos en ese organismo político que es el Consejo de la Magistratura que elige y designa jueces? Son los argentinos los que también tienen que opinar y participar, abrir las compuertas, darle luz y visibilidad.
Y hay algo que me obsesiona y me desvela y que es cómo hacer para que estas grandes transformaciones, que estas grandes conquistas, que van desde lo económico a lo social, hasta lo estrictamente igualitario como fue otro gran hito histórico del cual me siento orgullosa y del cual fue artífice Néstor como fue el matrimonio igualitario en la República Argentina.
¿Cómo hacer? Yo encuentro una sola manera. Porque quiero decirles algo: estos años felices, estas medidas que trajeron felicidad al pueblo en esta década ganada, fueron, es cierto, medidas para la felicidad del pueblo, pero no fueron medidas fáciles para el Gobierno: por cada medida, por cada decisión, un ataque. Cuando él decidió pagarle al Fondo Monetario Internacional, cuando decidió reestructurar la deuda, cuando en Mar del Plata le dijo "no" al ALCA, junto a otros patriotas como Lula, como Chávez, querido compañero y amigo Hugo Chávez, eterno en el corazón de nuestro pueblo también, o tal vez, cuando tomamos la decisión de recuperar los fondos de las AFJP, terrible decisión, corrida cambiaria, mis dos gobiernos llevan más de 3 o 4 corridas cambiarias presionándonos para que hagamos cosas que perjudiquen a la gente.
No es fácil, no son fáciles las presiones. También me pregunto, cuando alguno habla de fin de ciclo, ¿será que piensan que los dineros de los trabajadores que hoy están en la ANSES, vuelvan a comprar acciones como algún diario vendió sus acciones a no sé cuántos pesos que hoy no valen nada? Tal vez se quiera volver a eso cuando se habla de fin de ciclo.
Por eso, mi desvelo, mi obsesión es que esta sociedad de los 40 millones de argentinos se organice en forma unida y solidaria pero, al mismo tiempo, comprendan.
Yo el otro día, recordando a Jauretche, hablaba de los zonzos y contaba una anécdota de precisamente cuando se emitieron los famosos bonos para pagar a los argentinos que habían quedado atrapados en el corralito. Muchos los vendieron.
Cuando el año pasado pagamos el corralito, solamente era un 20 por ciento de argentinos, el otro 80 por ciento, era de extranjeros que habían comprado a 2 pesos lo que valía 100. Porque a muchos argentinos, inclusive argentinos instruidos, argentinos de clase media, argentinos que han tenido la oportunidad de la educación, tal vez no la de entender, sí la de saber. Pero hay una gran diferencia entre saber y entender. Lo que yo quiero es, finalmente, que los 40 millones de argentinos entiendan y comprendan cuáles y dónde están sus verdaderos intereses y me desvela.
Por eso, el otro día, cuando anunciaba las medidas de aumento en todas las asignaciones, de la Universal por Hijo, por embarazo, las de los trabajadores registrados, cuando anunciaba esas medidas, decía que tenemos que organizar a la sociedad para cuidar esa conquista, mirar para cuidar. Y yo convoco a todos los argentinos al momento –quiero decirles algo- empezaron a llegarme, yo en ese momento hablé de los jóvenes, de las iglesias, al momento comenzaron a llegarme mensajes de centros de jubilados, de gente que quería participar.
Porque quiero decirles algo: si no se organizan, si no participan, si no cuidan ustedes mismos lo que es de ustedes, van a venir otra vez por todos ustedes como lo han hecho a lo largo de toda la historia.
Tenemos los argentinos el deber de no depender de una persona; tenemos el deber, pero sobre todo la necesidad, de empoderarnos nosotros mismos de esas conquistas y de esos derechos y de organizarnos para defenderlas. Con eso sueño.
Sueño también con una Argentina como la que hemos logrado en esta década, la década ganada pero también la década de la solidaridad, la década donde cada argentino o por lo menos una gran parte de los argentinos, ha comenzado a mirar al costado o, tal vez, un poco atrás donde otro argentino u otra argentina todavía le falta algo, hay muchos a los que todavía les faltan muchas cosas. Yo les pido a los que ya han tenido logros que ayuden a que otros también lleguen al mismo lugar que ellos tienen.
Esa unidad, esa organización, esa participación, es lo que siempre les digo, lo que le dije...yo también los quiero mucho...es lo que dije otro día histórico también y de homenaje, nuestro último 2 de abril en Puerto Madryn, donde homenajeamos a nuestros veteranos y combatientes y caídos en la guerra de Malvinas, inclaudicable demanda de soberanía: la patria es el otro, la patria es el otro, es el que todavía no ha podido conseguir trabajo o que consiguiéndolo no está registrado; la patria es el que todavía tiene y lucha y trabaja para conseguir su casa propia. El otro es ese joven que tal vez no pueda estudiar todavía porque tiene que trabajar para ayudar al hogar; el otro también es el que sufre adicciones y tenemos que ayudarnos hermanos a rescatarlos entre todos para combatir los flagelos modernos que tiene nuestra sociedad. La patria es esas mujeres que han luchado por más de 35 años pidiendo justicia; la patria es también esos miles y miles de emprendedores que gracias a este proyecto político, que quede claro además, este no es un modelo económico, que quede claro que este es un proyecto político con objetivos económicos, sociales y culturales. Digo entonces, que es necesario empoderar a la sociedad.
Y en cuanto a los insultos, a los agravios, a la descalificación y difamación permanente, inclusive contra los que ya ni siquiera pueden defenderse porque no están, le seguiremos contestando con gestión, con acción, con trabajo, con sacrificio, con esfuerzo, con militancia, con participación. Porque no van a lograr lo que quieren. En realidad quieren dividir como siempre lo hicieron los argentinos, quieren instaurar climas de división, de insulto, de agravio, de odio permanente. No lo van a logar, conmigo no van a poder, no van a escuchar una sola palabra de ofensa; sí de ideas, sí de debate, sí de política.
Necesitamos imperiosamente ser más inteligentes, porque el odio nubla las mentes, no nos deja pensar. Y nosotros queremos pensar, pero pensar, no solamente en esto que estamos haciendo, sino en todo lo que todavía nos falta hacer.
Esta plaza no es una plaza de ayer ni de hoy, es una plaza de futuro, de porvenir, es una plaza y una patria preñada de esperanzas, de sueños, de ilusiones como las que él tuvo.
Yo quiero finalmente, recordar a modo de homenaje, aquel 25 de mayo de 2003, cuando junto con Florencia, que sé que anda por ahí en medio de la plaza, lo acompañamos al Parlamento para que asumiera como presidente. Yo nunca lo había notado, pero viendo imágenes en películas, yo como iba adelante, para mí el Parlamento, claro, había estado allí desde 1995, era un lugar común, era el lugar de todos los días, era el lugar de mi trabajo, iba adelante saludando, parecía una estrella de cine que entraba por la "red carpet" al Parlamento. Y pude ver, cuando él ya no estaba, hace muy poco tiempo, pude ver las filmaciones que nunca había registrado y lo vi entrar atrás mío, iba constantemente abrazándola a Florencia, había en su cara, no lo había notado, un gesto de angustia, un gesto de nerviosismo, un gesto que presagiaba las tormentas y las luchas que iba a tener que dar.
Tal vez, cuando dijo que no pensaba dejar sus convicciones en la puerta de la Casa de Gobierno, nos parecía que hacía honor a todas las generaciones a las que él había pertenecido. En realidad, estaba diciendo que se iba a jugar y hacer todo lo que tuviera que hacer y sabía lo difícil que iba a ser, tal vez, como nadie.
Por eso, yo quiero agradecer el acompañamiento de todos los argentinos que creen en este proyecto.
También quiero agradecer a los que sin pensar como nosotros, son respetuosos y tienen ideas diferentes y tienen todo el derecho a tenerlas. Yo solo les pido, no en nombre mío, no en nombre de los que hoy estamos aquí, sino en nombre de los que se fueron, en nombre de sus propios hijos, que sepamos disentir con respeto, sin ofensas, sin descalificaciones, sin agravios, sin injurias, démosle a nuestros hijos una patria mejor, porque ellos también van a vivir al lado de los nuestros, que por favor recreemos todos un clima en el cual las ideas se debatan con altura.
Tenemos la inmensa suerte de una democracia participativa, tenemos la inmensa suerte de una libertad de expresión sin precedentes en la historia argentina, tenemos también y aquí también tengo el derecho a decirlo, somos un Gobierno que también nos hemos hecho cargo del costo político que muchas significa no reprimir a un solo argentino porque corta una calle o porque piensa distinto.
Sabemos que eso no está bien, sabemos que no es justo que otro argentino llegue tarde a su trabajo, a su casa o a sus obligaciones, sabemos que tienen razón en enojarse, pero les pido perdón, le pido perdón a cada uno de esos argentinos que se enoja y dicen que así no se puede vivir más.
Yo no voy a ser una presidenta que le dé palos a nadie, eso se los puedo asegurar, porque eso nunca ha sido ninguna solución en la Argentina.
Y les pido a todos de corazón, que pensemos en nuestros hermanos, que pensemos también en este mundo que estamos viviendo complejo.
Hoy leía los diarios y hasta ahora eran los países más conocidos, España, Francia, Italia, hoy leía que hasta Suecia hay problemas graves a partir de la economía que sigue sin recuperarse en el mundo. Y nosotros hoy tenemos la expectativa de una economía que está generando nuevamente crecimiento, incipiente pero crecimiento nuevamente.
Ayudémonos entre todos a sostener la Argentina porque esto es bueno para todos.
No se confundan, no se confundan, hubo una vez o varias tal vez, que algunos pensaron que tanto peor, tanto mejor. Nunca nadie se equivocó tanto. Es mentira; cuando las cosas empeoran, empeoran para todos y si no, acuérdense de aquel 2001 que vivimos los argentinos.
Néstor entró en la Casa de Gobierno como el fenómeno, como el producto de esa suerte de derrumbamiento que tuvieron los valores preestablecidos en la República Argentina; preestablecidos vaya a saber por quién, o sí lo sabemos, por los sectores más concentrados que son los que siempre se salvan cualquiera sea la crisis, cualquiera sea el presidente y cualquiera sea el partido.
Entonces argentinos, no les pido que estén de acuerdo con lo que pienso, no les pido que estén de acuerdo con nuestras políticas, sólo les pido que tengan memoria, que sean inteligentes y que piensen en la patria, porque todos somos la patria, los 40 millones de argentinos. Ese es el homenaje en estos 203 años de la Revolución de Mayo a esos hombres que combatieron y a esas mujeres también, no me quiero olvidar de la generala Juana Azurduy, a esos hombres y mujeres que combatieron por las libertades.
Hoy necesitamos hombres y mujeres que luchen por la igualdad, por la inclusión; hombres y mujeres que en cada uno de sus ámbitos hagan bien su trabajo, científicos, investigadores, docentes, alumnos, trabajadores, empresarios, comerciantes, productores, todos, todos juntos. Cada vez que nos hemos desunido, las cosas fueron mal para los argentinos.
Quiero finalizar con ese ejemplo maravilloso, en medio de una tragedia y una desgracia como la que ocurrió en los primeros días de abril en mi querida ciudad de La Plata, el otro día estaba en el Colegio Nacional entregándole fondos al Hospital Español, una vieja institución por más de 70 años, privada, comunitaria, porque había sido arrasada por la inundación. Quiero que tomemos ese ejemplo, cómo se volcó el pueblo solidario y también algo maravilloso que me llenó el corazón y que fue ver trabajar a miles y miles de jóvenes de la política, de las iglesias junto a los hombres de las Fuerzas Armadas, porque ¿saben qué? Yo estoy segura que quienes pergeñaron ese golpe terrible del 24 de marzo de 1976, quisieron tender un río de sangre que separara al pueblo de las Fuerzas Armadas.
Tenemos que cerrar ese río con memoria, con verdad, con justicia, con trabajo y con convicciones de que tenemos que unirnos porque la patria es el otro, sea quién sea.
Gracias a todos, gracias a todas. Feliz 203 aniversario de la Revolución de Mayo.
Amigos, amigas, compañeros y compañeras, argentinos y argentinas: ¡siempre por la patria, por el futuro, por nuestros hijos y nuestros nietos! ¡Adelante!
Gracias de corazón a todos, muchas gracias. (Aplausos)
31º aniversario del inicio de la Guerra de Malvinas: discurso de la Presidenta de la Nación
Muy buenos días a todos y a todas.
Señor Gobernador de la provincia de Chubut; señor Intendente de Puerto Madryn; excombatientes, combatientes, sin el ex, combatientes de Malvinas, cuando un militar se retira, nadie le dice exmilitar, sigue siendo militar; cuando un combatiente ha combatido, sigue siendo un combatiente, más allá de que hoy la paz y la diplomacia sean los únicos caminos.
Quiero también saludar a los familiares de los combatientes que nos acompañan, de los vivos y de los caídos y de los que yacen allá en Puerto Argentino, especialmente de los 123 "NN, soldado argentino", solo conocido por Dios que esperamos poder identificar prontamente.
También, darle la bienvenida a las organizaciones de derechos humanos que hoy nos acompañan, a los movimientos sociales y dirigirnos sin ningún tipo de distinción a todos los argentinos en una fecha tan especial.
Martín Buzzi, el Gobernador, hablaba de cómo vivimos los patagónicos, cómo lo vivió él tal vez en Comodoro, cómo lo vivió aquí la gente de Puerto Madryn. Nuestra Presidenta, que ni soñaba si quiera ser presidente, es más, ni soñaba ser senadora o diputada nacional allá por el año 82, en Río Gallegos, le comentaba recién al Intendente, somos en Río Gallegos la ciudad más cercana en línea recta a Malvinas y por eso también vivíamos bajo la amenaza constante aquellos días de que Río Gallegos fuera bombardeada por los ingleses porque decían que de esta manera iban a acabar con la guerra. De la misma manera que en la Segunda Guerra Mundial, se bombardeó Hiroshima y Nagasaki para terminar con la resistencia del pueblo del Japón, también se amenazaba con bombardear Río Gallegos para terminar con la resistencia de los argentinos, bajo...
No puedo olvidarme nunca de esos días, me visitaba mi madre, que había venido de La Plata y como la mayoría de las casas patagónicas, que no tienen persianas ni postigos, debíamos todas las noches hacer los operativos oscurecimiento y entonces, colgar frazadas en las ventanas y en nuestros autos, colocar los adhesivos negros para que apenas una línea pudiera identificar la marcha de un coche.
La ciudad se sumergía en la más profunda y terrible oscuridad, mientras se escuchaba el rugido de los aviones que muchas veces salían y otras tantas no volvían.
Hoy estamos y hemos hecho una elección: estar aquí, en Puerto Madryn. Porque este 2 de abril, es un homenaje, un homenaje instituido por el pueblo argentino a través de su Parlamento, a todos los veteranos y a todos los caídos. Y queremos estar aquí en Puerto Madryn, porque aquí regresó ocultado desde las islas hacia el continente en el Canberra, en el Northland, en el Irizar y en el Paraíso, más de 7.000, casi 8.000 de los 10.000 u 11.000 combatientes que estuvieron allí.
Los ocultaron pero, como lo indica el testimonio fotográfico que me acaba de obsequiar el Intendente de Puerto Madryn, este pueblo, este pueblo argentino que nunca ha traicionado la memoria de los que lucharon por él y murieron por él, salieron a la calle a recibirlos, a entregarles comida, a permitirles hablar de sus casas por teléfono para comunicarse con sus familiares.
Luego, fueron escondidos en un acopio de lanas, Lahusen, que por allí todavía existe y que más allá del puente aéreo que se hizo luego desde Trelew hasta Buenos Aires.
Por eso, decidimos estar hoy aquí en Puerto Madryn, para decirles a todos y cada uno de esos combatientes, pero también decirles a todos y cada uno de los argentinos, a lo largo de estos 200 años de historia, que han luchado por la independencia, que han luchado por su patria, que han luchado por sus ideales, por sus convicciones, porque luchar por la patria es también luchar por el otro, por el prójimo, que jamás volverán a ser olvidados, que jamás volverán a ser ocultados porque son la gloria de la Nación y las glorias, se conmemoran y se festejan, no se ocultan.
Cómo no reconocer, cómo no homenajear a esos jóvenes que sin preparación, sin elementos, abandonados a la suerte de Dios y a su propia pericia o impericia, los mandaron a enfrentar a un enemigo profesionalizado y digo "enemigo", porque era guerra, estoy hablando en esos términos en ese momento, que nadie descontextualice mis palabras. Hoy la Argentina no tiene enemigos; el único enemigo que tiene la Argentina es la pobreza y la desigualdad que estamos combatiendo desde hace más de 10 años. Que nadie se equivoque.
Ningún pueblo de la Tierra, ningún ser humano es enemigo del pueblo argentino o de la Argentina por el hecho de pensar diferente o tener un idioma diferente o querer una nacionalidad diferente.
Lo único que seguimos pidiendo incansablemente, como lo haremos y como lo haremos en otras causas, es, precisamente, que se cumpla con el Derecho Internacional y que el gobierno del Reino Unido, el gobierno, no estoy hablando de su pueblo...¡Cuántos ingleses viven aquí en la Patagonia! ¡Cuántos de nuestros vecinos, de nuestros amigos son de origen inglés! ¡Cuántos ingleses viven en la Capital argentina!
Que no nos confundan, que no nos desvíen y que tampoco utilice el gobierno del Reino Unido a Malvinas para ocultar el desastre económico y social que sucede hoy en Europa producto de políticas de ajuste, de atraso y de saqueo a trabajadores, a pequeños y medianos comerciantes y empresarios.
Hoy leía, antes de venir aquí, que han propuesto un nuevo ajuste allá en Londres y que los "tories", el partido gobernante, está dispuesto hasta sacrificar a su líder en pos de ese ajuste.
Claro, acicatear con una Argentina les puede servir para muy poco, porque en realidad, este país, nuestro país solamente participa en misiones de paz con nuestras Fuerzas Armadas.
Y nos seguimos preguntando por qué, por qué se niegan a hablar y dialogar con un gobierno democrático, con un gobierno que ha hecho de la defensa de los derechos humanos y sociales, una bandera inclaudicable, que ha hecho de la libertad de los pueblos y de Latinoamérica también, algo inclaudicable, ¿por qué? Y, sin embargo, dialogaban o estaban dispuestos a dialogar con una dictadura sangrienta y genocida. Es incomprensible en este siglo XXI.
Negarse al diálogo, ni siquiera en esa resolución de las Naciones Unidas se le da la razón a uno o a otro; se reconoce que hay una cuestión de conflicto sobre la soberanía y se pide el diálogo. ¡Cómo alguien puede negarse al diálogo y querer estar del lado de los autodenominados países civilizados!
Yo creo que las cosas no van a poder mantenerse así demasiado tiempo; es demasiada incongruencia, demasiada incoherencia. Y además creo que los pueblos merecen que los gobiernos se ocupen de los verdaderos problemas que tienen esas sociedades y no distraigan recursos, armamentos, inútiles, por otra parte, porque lo único que hacen es militarizar un Atlántico Sur que hoy está libre de todo conflicto.
Nosotros a eso le vamos a responder con un gran proyecto que estamos encarando desde el gobierno de Chubut entre el ministerio de Ciencia y Tecnología, entre el gobierno de Canadá, sí, el gobierno de Canadá, para que vean que no nos mueve ningún rencor ni ninguna alianza momentánea, que se pueda tener una estrategia diplomática en lo que denominamos este maravilloso mar argentino, que está aquí a mi espalda, y a lo que denominamos una "pampa azul". Así como tenemos una pampa verde, esto es una pampa azul y la vamos, en un proyecto que estamos en los Núcleos Socio Productivos número 8, que hemos presentado hace pocos días en Argentina Innova, muy pronto, con un buque, el Coriolis II, vamos a hacer grandes estudios.
Mientras ellos envían naves de guerra a este mar argentino, nosotros vamos a poner una nave científica para la ciencia, la tecnología y el conocimiento. Eso es lo que quiere el mundo y la sociedad. La guerra solo le sirve a los que venden armas, la guerra solo le sirve a los que fabrican armas. Nosotros queremos crear conocimiento, queremos generar ciencia y aplicarla, queremos saber todos los recursos y toda la potencialidad de este mar argentino, de este maravilloso Golfo San Jorge...Y por eso...Nuevo, ya sé, estoy en Puerto Madryn, bueno, para que no se enojen los de Comodoro, che, que andaban medios cabreros porque no había ido para Comodoro, ¡qué tontería! Golfo Nuevo, Golfo San Jorge, todos los golfos...
El mayor recurso, por lo menos explorado hasta ahora ictícola, lo tenemos en el San Jorge, por ahí vamos en el Nuevo también con mayores recursos.
Pero, digo, que mientras mandan buques de guerra, nosotros vamos a poner sobre el mar argentino un buque científico.
También, el otro compromiso que tenemos con los familiares, con esos 123 NN, que yacen en Puerto Argentino, en el Cementerio Darwin, 123 soldados argentinos solo conocidos por Dios. A través del ministerio de Justicia y tal cual nos habíamos comprometido y lo habíamos anunciado, ya hemos localizado a 100 familiares y 91 familiares nos han firmado el pedido, el 75 por ciento, para hacer la presentación que ya habíamos efectuado ante la Cruz Roja Internacional que requería, precisamente, era este instrumento: el pedido de los familiares directos para lograr la identificación de estos soldados, que merecen tener una placa con su nombre y apellido, que cada madre, que cada padre pueda hincarse en esa tumba, rezarle a su hijo y ponerle una flor. No estamos pidiendo nada más que eso, un elemental ejercicio del más elemental de los derechos humanos que es velar y honrar a nuestros muertos.
Estamos en marcha con este plan y lo vamos a llevar adelante porque, además, contamos con el más eficaz y eficiente equipo de identificación de ADNs.
Hubiéramos querido tal vez no tenerlo, porque lo tuvimos por lo que nos pasó en la dictadura y para poder identificar los restos de los detenidos desaparecidos.
Pero en realidad también, en cierta manera, durante mucho tiempo se quiso hacer desaparecer lo que había pasado a los que habían combatido, a los que yacían allá y lo peor de todos, quisieron olvidar o hacernos olvidar a los argentinos que las Malvinas son argentinas y que son una causa inclaudicable para todos nosotros. Pero, que ya no es únicamente una causa argentina. Porque si de algo me enorgullezco, si de algo me siento plena de amor, es haber logrado, con el acompañamiento de todos los mandatarios de la América latina, de la UNASUR, del MERCOSUR, de la CELAC, haber convertido a Malvinas, ya no es una causa nacional, sino en una causa regional de soberanía y en una causa global de lucha contra el colonialismo.
Porque tenemos aquí muy cerca, uno de los últimos vestigios de una de las lacras que más avergonzaron las últimas centurias de la humanidad, que más la ennegrecieron y que fue el coloniaje, el coloniaje de las grandes potencias después del 1400. Primero nuestro continente, en el África, en distintas partes del mundo que se han ido afortunadamente independizando. Creo que quedan 16 causas, ¿no Canciller?, de las cuales, ¿cuántas son inglesas?, 10 de 16.
Fíjense: si uno mira el mapa del mundo 200 años atrás, no es tanto tiempo en términos de historia, veía que muchísimos territorios, casi todos o la mayoría de los grandes territorios del mundo eran colonias. Hoy, solamente hay enclaves.
Es cierto que también han cambiado los métodos de colonización; es cierto también que ya, al no poder sostener ocupaciones territoriales y geográficas, mutaron, sobre todo en el último siglo, en ocupaciones económicas y en colonización cultural. Tal vez no tan visible, tal vez no tan palpable, tal vez no tan identificable pero, sin embargo, tan o más mortífera que la geográfico-territorial.
Pero yo quiero aquí, frente a todos ustedes, pueblo de la Patagonia, y frente a todos los argentinos, una vez más, el compromiso irrenunciable de esta causa que es una causa de Estado. Quiero agradecer también a los representantes de los distintos partidos de la oposición que hoy nos acompañan. Es bueno que los argentinos estemos unidos. Cada vez que nos hemos dividido, cada vez que nos hemos separado, han venido por nosotros y más tarde o más temprano, las grandes mayorías, las inmensas mayorías argentinas, pagaron muy caro esa desunión y esa confusión que muchas veces introducen en nuestras cabezas si creemos que el otro, porque está en un lugar político diferente o porque tiene una tez de color diferente o porque tiene más o menos instrucción, es un enemigo.
Yo les pido a todos, en honor de esos argentinos que sin pedir nada entregaron todo, que cada argentino, cuando mire al costado o frente a sí, vea a otro argentino, vea a un hermano con el cual hay que superar las diferencias, por el cual hay que coincidir en lo importante. No hace falta pensar todos igual, no hace falta ser exactamente iguales porque no pasa en ninguna parte, ni siquiera dentro de nuestra propia familia. Pero siempre pensando, antes de tomar una decisión, antes de decir una palabra que separe, pensando a quién servimos haciendo eso. Y ese ejercicio pequeño, elemental a quién le sirve que yo me pelee con el otro. ¿A mí o a quién más?
Por eso, en este día de recuerdo y de homenaje, quiero también, para finalizar y porque en definitiva aquellos que fueron a combatir, como lo dije al principio, lo hicieron por un profundo amor a la patria. Pero si no se quiere al pueblo, si no se quiere al prójimo, es imposible querer a la patria. La patria es el otro, la patria es el prójimo. Por eso, no nos olvidemos nunca de eso, la patria es el otro, no es un concepto vacío, no es un concepto abstracto.
Yo quiero terminar con un homenaje de lo que para mí debe ser el ideal, que es el amor al prójimo. Quiero homenajear a un joven militante político, chubutense, de Rawson, a Matías Gensana, un joven de 24 años. Fíjense que chiquito que era, 24 años, hoy estamos conmemorando 31º aniversario de aquel 2 de abril, no había nacido, nació en democracia, y ese joven, Matías Gensana, de 24 años, junto a su primo, este último 3 de enero, estaba como estarían tantos chubutenses en la playa Unión, ahí cerca de Rawson, y vio que 3 niñitos se estaban ahogando y no lo dudó un instante, se lanzó con su primo al mar a salvarlos y los salvó a los 3, pero a él se lo llevó el mar.
Recién me estaba esperando aquí abajo su madre. ¡Qué inmenso ejemplo de amor al prójimo! ¡Qué inmenso ejemplo de amor al otro! ¡Qué inmenso ejemplo de dar la vida sin pedir nada a cambio!
Y me vienen a la memoria las palabras de Néstor: "Los que se la pasan especulando, nunca van a pasar a la historia". A la historia pasan siempre los que se la juegan todos los días en todo el tiempo por la patria, por el otro y por la vida, que es lo que queremos.
Gracias Puerto Madryn, gracias Chubut, gracias Argentina, que Dios los bendiga a todos.
Inauguración de la primera exploracion de gas y petróleo
no convencional de YPF en Chubut: Palabras de la Presidenta de la
Nación
PALABRAS
DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN CRISTINA FERNÁNDEZ, EN EL ACTO DE
INAUGURACIÓN DE LA PRIMERA EXPLORACIÓN DE GAS Y PETRÓLEO NO CONVENCIONAL
QUE EMPRENDE YPF, EN COMODORO RIVADAVIA, EN LA PROV DE CHUBUT.
Gracias, muchas gracias, muy buenas tardes a todos y a todas; señor
Gobernador de la provincia de Chubut, señor Intendente, vamos a hacer
una cosa para que podamos hablar, vamos a felicitar a las nuevas
autoridades de petroleros, elegidas recientemente: Jorge Ávila, Rudy
Fornier, Carlos Márquez, Martínez, todos, felicitarlos a todos, gracias:
estoy muy feliz de estar aquí, una vez más, en Comodoro Rivadavia, un
lugar entrañable al que he asistido decenas de veces como militante
política, pero recordaba hoy, que es la cuarta vez que visito como
Presidenta de la República a esta querida ciudad. Pero hoy tiene un
sabor muy especial, porque vengo por cuarta vez, pero hoy YPF ha vuelto a
ser de los 40 millones de argentinos. (Aplausos).
Para nosotros, y si se me perdona un poco el regionalismo, los
patagónicos tiene un sabor muy especial y para esta Presidenta que lanzó
su primera – sí con Néstor, siempre con él – campaña en una tribuna fue
precisamente, aquí, en el Norte, en el Golfo San Jorge, en la Ciudad de
Caleta Olivia, y también en el sindicato de petroleros privados de
Caleta Olivia, para mí todo el sector tiene muchísimos recuerdos y
muchísimas connotaciones que inclusive van más allá de lo político y de
lo institucional.
Por eso, estar hoy aquí, junto a todos los comodorenses, junto a
todos los chubutenses, los patagónicos compartiendo esta fuerte
inversión, que está haciendo nuestra YPF, para explorar aquí, para
explorar dije - no explotar - que los petroleros saben la diferencia que
hay porque significa explorar nuevos puestos de trabajo, estamos
explorando gas no convencional, combustible no convencional por primera
vez, aquí en Chubut. También en algo que como le he dicho a Miguel, al
presidente de YPF, al ingeniero Galuccio, debe ser también muy
importante la recuperación de nuestros yacimientos maduros, por eso
también estamos iniciando la campaña con polímeros para la recuperación
de los yacimientos maduros y seguir teniendo más energía de carácter
convencional.
Y uno de los desafíos más grandes que tuvimos, cuando tomamos la
decisión de volver a recuperar para el patrimonio nacional lo que nunca
debió haber sido vendido, fue precisamente detener lo que – en la jerga
petrolera – se llama el declino y que para el común de la gente es
simple y sencillamente volver a producir más gas, más petróleo y más
combustible. Porque recién Miguel hablaba de ocho meses y parece que
fueran ocho siglos, pero hace apenas ocho meses en todas las estaciones
de servicio de la República Argentina había largas colas para cargar
combustible a lo largo y a lo ancho del país. Nadie puede hacerse el
distraído. Recuerden los que tengan un poco de memoria lo que fueron las
vacaciones pasadas, en las localidades de la costa, donde había largas
colas; en el Norte del país, en Jujuy; aquí en Comodoro; en mi
provincia, en Santa Cruz, en Tierra del Fuego. ¿Qué fue, se produjo
algún milagro? No, simplemente se volvió a reinvertir lo que se sacaba
de la Argentina en nuestro propio país para seguir produciendo más.
(Aplausos).
No hay misterios, no hay magia, es la decisión política de que una
empresa del país, una empresa vital y estructural porque permite generar
la energía que alimenta el proceso de reindustrialización más grande
que se recuerde y que fuera iniciado por él, en el 2003, ha vuelto a
producir para y por el país. Pero entonces, cuando las cosas comienzan a
mejorar y se demuestra que los argentinos somos capaces de gestionar
nuestras empresas con mayor eficiencia, mayor eficacia, que no hace
falta ser extranjero para ser bueno y eficiente, que los argentinos
podemos ser buenos y eficientes. (Aplausos). Cuando comenzamos a mejorar
empiezan lo que yo denomino las operaciones. El otro día leíamos un
artículo - sin firma – en un importante diario, no importa cuál, pero ya
todos se imaginan de cualquier manera, donde se hablaba que habíamos
declinado en la producción. Al contrario, hemos parado el formidable
declino que tenía la producción de gas, y la producción de petróleo y la
producción de combustible aumentando considerablemente, y este año lo
vamos a volver a hacer.
Tengan en cuenta que declinaba la producción en números más que
importante, del 5 por ciento, del 7 por ciento, y al mismo tiempo
aumentaba el parque automotor, y al mismo tiempo aumentaba la demanda de
energía, porque claro, durante el año 2011, crecimos al 8,9 por ciento,
y en lugar de producir más nuestra empresa producía menos; teníamos más
autos, la gente consumía más, las empresas también, el comercio
también, las industrias también y, sin embargo, YPF producía menos. Y
producía menos no solamente en equipos en los campos – como ustedes lo
saben – sino que también producía menos en nuestras destilerías y en
nuestras refinerías sub-explotando su capacidad.
Fue precisamente, a partir de la decisión que adoptamos la más
difícil, porque tal vez, como siempre lo manifiesto, hubiera sido más
fácil el ciento por ciento, pero decidimos jugarnos a que la empresa
siguiera cotizando en bolsa, a dar una muestra de que éramos capaces de
trabajar y ser fiscalizado también. Por eso la decisión fue del 51 por
ciento el control del Estado y la mejora sustancial en la producción.
Siempre le digo a Miguel y a todo su equipo, a Axel y a todos: “nos
van a tirar, cada vez que andemos mejor cada vez nos van a tirar más”.
Es casi una regla de determinados sectores que necesitan gobiernos
débiles, que necesitan sociedades sojuzgadas para poder imponer
intereses de los sectores minoritarios. Y los trabajadores de la
Argentina lo saben muy bien, porque yo me acuerdo - compañeros – del
año 1998, cuando el barril de crudo llegó a 9 dólares y miles de
trabajadores petroleros quedaron en la calle. No me lo contó nadie, yo
vivía en Santa Cruz, no vivía en Buenos Aires, soy testigo de lo que nos
pasó. (Aplausos)
Por eso creo que los trabajadores, junto al personal jerárquico,
junto a los otros gremios que trabajan en la industria petrolera:
petroleros, de la UOCRA, camioneros, todos juntos debemos cuidar las
fuentes de trabajo, mejorar la competitividad de la empresa, porque si
nosotros logramos producir más y mejor vamos a estar cuidando muy bien
nuestras fuentes de trabajo, y fundamentalmente los intereses de la
Patria a los que estamos indisolublemente ligados. Y si hay un lugar
donde la Patria se siente indisolublemente ligada a los intereses de los
trabajadores y de las empresas es precisamente en esta Patagonia y en
este Comodoro Rivadavia, cuna del petróleo argentino: (Aplausos).
Las cifras que recién el ingeniero Galuccio mostraba…los pibes
siempre van a estar, si no están los pibes estamos en problemas, los
trabajadores y los pibes si no estamos en problemas, todos juntos. Los
quiero mucho. Quiero decirles que las cifras, que recién mostraba el
ingeniero Galuccio demuestran a las claras lo que ha sido YPF, en esta
gestión de apenas 8 meses, cómo hemos logrado revertir. Yo tampoco soy
ingenua, yo creo sinceramente y lo he dicho, en muchas oportunidades,
que creo que había una cierta orientación, una cierta intención
precisamente de que la gente estuviera molesta porque faltaba la nafta o
por muchísimas cosas más porque sino no se entienden las cosas que han
pasado. Pero yo no quiero detenerme en ese pasado, que afortunadamente,
hemos dejado atrás, quiero hacer hincapié en este presente y, sobre
todas las cosas, en el futuro. Y como Presidenta de todos los argentinos
poder venir, aquí, a Comodoro Rivadavia, y pararme frente a ustedes: a
los trabajadores, a los ciudadanos, a los habitantes de Comodoro, a los
chubutenses, junto a las autoridades de YPF, y poder venir a rendir
cuentas de lo que estamos haciendo, de lo que hemos crecido y de esto
que no se hacía.
Lo charlábamos con el Gobernador, hacía más de 15 años que no se
hacía un proceso de exploración, en Comodoro Rivadavia. (Aplausos). He
venido a rendir cuentas, entonces, de esta tarea, que es volver a
colocar a YPF entre las grandes empresas, a nivel global. Tenemos la
tercera reserva de gas no convencional, pero yo estoy segura – además –
que tenemos muchísimo convencional que todavía tenemos que extraer y aún
que explorar en muchísimas partes de la República Argentina y de
nuestra Patagonia también. (Aplausos).
Por eso queremos ir por todo: por el convencional y por el no
convencional, con toda la fuerza de los trabajadores, de las empresas,
de sus técnicos, de sus profesionales, de sus ingenieros, de sus
mujeres, en un país que ha venido sorteando esta crisis internacional
sin precedente. Todos los días, cuando encendemos nuestros televisor,
vemos – en la sección internacionales –despidos por doquier en los
países desarrollados, compañías aéreas que achican y despiden a sus
trabajadores, desalojos y, sin embargo, esta crisis que en otro momento,
de habernos tomado en otro período histórico y económico y social
hubiera arrasado con la Argentina hemos podido sostener, sin embargo, el
nivel de empleo, y aún cuando no hemos crecido con la intensidad que lo
venimos haciendo en los casi últimos diez años, este año que fue la
peor crisis de todas, hemos crecido al 1,9 por ciento nuestro Producto
Bruto Interno, que va a ser publicado – seguramente – el próximo día
viernes. Un 1,9, yo creía que íbamos a estar un poco más abajo todavía,
pero se repuntó en el último trimestres, se notaba en el último
trimestre el repunte. ¿Y saben por qué pudimos hacer frente a esta
crisis? Porque del año 2003 en adelante, comenzamos a desarrollar
nuevamente nuestras industrias. Si hubiéramos sido solamente un país de
servicio, como son alguno de los países que han caído estrepitosamente,
en Europa, porque cuando hay una crisis el servicio no puede mantener el
trabajo e inmediatamente cae. La que puede sostener y aguantar más
tiempo la dureza de una crisis global es la industria porque tiene una
matriz de núcleo duro de manutención del trabajo y fundamentalmente
porque sirve para alimentar al mercado interno que hemos desarrollado y
que es lo que nos ha permitido sobrevivir en esta crisis tan fuerte.
(Aplausos).
Este mercado interno que sigue consumiendo porque sigue la política,
inaugurada en el año 2003, de mejorar constantemente el poder
adquisitivo de nuestros trabajadores, porque ha desarrollado políticas
de inclusión social, como la Asignación Universal por Hijo, que ha
permitido que aquellos sectores que no tienen un trabajo formal o que
aún están desocupados puedan consumir y esto es básico: sostener la
demanda y sostener el consumo para que la industria pueda seguir
produciendo. Esta ha sido una de las claves, porque eso es muy
importante darse cuenta, entender, comprender para no volver a
equivocarnos nunca más.
Yo quiero terminar con una carta, un e-mail, bueno ahora ya no te
mandan más cartas, un e-mail, que recibí anoche de un comprovinciano
suyo, Galuccio, el Gobernador de Entre Ríos. A las diez de la noche me
mandó un e-mail, con un título que decía: “Estalló Entre Ríos”. “Mi
madre”, dije yo. “¿Qué pasó?” y me lo puse a leer detenidamente. Me
hablaba de lo que había significado, este fin de semana largo, para la
provincia de Entre Ríos, más de medio millón de personas ingresaron a
Entre Ríos, más de 250.000 en el Carnaval de Gualeguaychú. En la ciudad
de Federación – me cuenta – donde está el centro termal más importante y
desarrollado de la provincia, 60.000 mil ticket, en enero, el 50 por
ciento más que el récord del año pasado, y ayer a la noche, estaban
saliendo – por hora – de Entre Ríos 2.700 vehículos por horas, más que
de la Costa Atlántica. (Aplausos).
Todo esto ¿saben por qué, no? Son varios los motivos: primero, porque
mucha gente que antes no podía vacacionar va a destinos internos
turísticos argentinos no convencionales, lo convencional es ir a la
costa, a la playa. Y también porque en algunos lugares de la costa y de
la playa se les fue la mano con los precios. Entonces la gente que no es
más tonta dice: “Así, bueno, enfilo para otro lado, donde no me
arranquen la cabeza y me roben”. Porque a nadie le gusta que lo roben y
me parece muy bien, para que vayan aprendiendo cómo viene la mano.
(Aplausos). Y lo que hay que hacer para cada uno defender sus propios
ingresos.
Por eso esta Argentina que crece, esta temporada turística sin
precedentes, en destinos convencionales, también en salida de argentinos
al exterior, para desmitificar esto de que no se pueden ir. No se puede
ir el que no tenga plata, o no tenga… pero el que tiene plata si se
puede ir, y el que tiene no tanta plata y puede pagar cuotas también se
puede ir, porque aumentó un 13 por ciento. Y bueno está bien, está muy
bien que los argentinos disfruten de esta Argentina tan distinta –
compañeros – tan distinta a aquella del año 2001. En esta Patagonia lo
conocimos muy bien, en esta Patagonia que quedó devastada prácticamente,
luego del todo el período y la oleada de privatizaciones, en esta
Argentina y en esta Patagonia que quedó totalmente abandonada, en esta
Patagonia en la que estamos llegando – con la línea de 500 – allá a la
punta del continente para interconectarnos definitivamente; en esta
Argentina donde hemos vuelto a construir viviendas, para los que no
pueden acceder a ella, y hemos vuelto a generar planes de viviendas,
como el Procrear, para los que sí tienen capacidad de tener una casa;
esta Argentina en la cual los chicos que van a nuestras escuelas
secundarias públicas tienen derecho a tener una netbooks para cubrir esa
brecha digital; esta Argentina donde los jubilados que se habían
quedado colgado de las ramas porque no le habían hecho sus aportes o
porque no tenían ingresos, hoy tienen la mayor cobertura previsional de
la América latina; esta Argentina que ha vuelto a recuperar a YPF; esta
Argentina que ha vuelto a recuperar la noción de dignidad, de
pertenencia y de identidad de los argentinos.
Aquí en la Patagonia siempre digo, las cosas siempre nos resultaron
más difíciles… el clima. Recién me comentaba una de las chicas, de las
que siempre me acompañan, pero que vive en el Norte me decía: “usted no
sabe fuimos hasta el Pozo, usted no sabe lo que…” Sí sé – querida - lo
que es un pozo; sí sé – querida - lo que es trabajar en el campo; si sé
querida – lo que es subirte al colectivo y trabajar 24 por 24, 12 por
12, sé todo eso porque viví acá, no me lo contó nadie. Entonces, quiero
pedirles a todo, que en nombre de esos sueños, en nombre de esos
dolores, de esos fracasos y de esas frustraciones que tuvimos que vivir,
durante aquellos años, no nos olvidemos. No para torturarnos o
flagelarnos, sino simplemente para valorar lo que hoy tenemos y seguir
luchando por una YPF cada vez más grande, por una Patagonia cada vez
mejor. Martín decía que aquí en la Patagonia, y es cierto ,vamos por
debajo de la tierra, pero yo también tengo una ilusión, porque hoy
estamos inaugurando una importante frigorífico en Gobernador Costa, que
nos va a permitir faenar 90 mil corderos u ovejas, como mejor les guste,
y hasta 20 mil vacas, y estamos también inaugurando una torre de la
televisión digital gratuita, abierta. Pero yo tengo – Martín,
patagónicos, chubutenses, comodorenses – la gran esperanza de que en
esta Patagonia no solamente podamos arrancarle la riqueza de debajo de
la tierra, sino que también con agua, con riego, con tecnología le
saquemos riqueza a la superficie. Porque con agua, con voluntad, con
ciencia, con tecnología sé que lo vamos a poder hacer. (Aplausos).
No debemos olvidarnos que los recursos que están debajo de la tierra
no son renovables, por eso tenemos que pensar estratégicamente, alguien
que tiene la responsabilidad de presidir la República no puede pensar
únicamente para mañana, pasado mañana o el año que viene y más aún
cuando sos hijos y los hijos de sus hijos van a vivir aquí. Tengo la
obligación de pensar en términos estratégicos y por eso también
convocarlos a todos: empresarios, ciudadanos, científicos, profesionales
a imaginar también una Patagonia donde produzcamos verdes, donde
produzcamos alimentos, donde saquemos también riquezas de la superficie
de la tierra y acompañemos el inmenso esfuerzo y sacrificio que viene de
las entrañas del suelo. (Aplausos). Ese es el gran desafío, no tengan
dudas y allí estaremos porque estamos moldeados por el viento, estamos
sacudidos por el frío, estamos torneados en la lejanía de los grandes
centros urbanos, aquí muchas veces se siente la soledad y el abandono y
quien ha experimentado esta sensación de soledad y abandono, como alguna
vez lo vivimos los miles y miles de patagónicos, sabemos que el
compromiso deber ser que nunca más ningún argentino vuelva a sentirse
solo y abandonado en su Patria, porque su Patria lo cobija, le da
trabajo, le da futuro, le da esperanzas, le da amor y le da lo único que
puede darle la Patria, que es futuro y dignidad. (Aplausos).
Muchas gracias, los quiero mucho a todos, que Dios los bendiga a todos ustedes y a sus familias, muchas gracias. (Aplausos).